Esta semana ha salido a la luz el Manual del Buen Autocaravanista. Estamos muy felices de poder presentarte esta guía que, de manera altruista, hemos preparado junto con Área 13 y Areas Ac, grandes profesionales del sector. Tenemos que agradecer también a Fiat su apoyo para la impresión y distribución del documento.
En los últimos años el sector autocaravanista y de furgonetas camper ha vivido un crecimiento considerable. Esto se ha traducido, entre otras cosas, en la aparición de áreas de autocaravanas en muchos pueblos y ciudades de nuestro país y al mismo tiempo en la aparición de empresas de alquiler de este tipo de vehículos. Son muchos los que antes de comprar un vehículo de estas características, que suponen una importante inversión, deciden alquilar durante unos días o semanas para conocer de primera mano cómo funciona el turismo itinerante.
Es principalmente para estas personas que se inician en el mundo camper o de autocaravana a quien va dirigido este manual. Aunque no está de más que todos le echemos un ojo para recordar algunas cosas y, tal vez, para descubrir otras.
Sabemos que os damos mucho la lata con el tema de conocer la diferencia entre acampar, estacionar y pernoctar. ¡Qué pesados somos! Pero este es el primer mandamiento de un autocaravanista consciente de cómo se mueve. Tienes que conocer tus derechos y también tus deberes. En la guía hemos compartido nuestras infografías sobre el tema.
También encontrarás información muy detallada sobre cómo actuar en determiadas situaciones y cómo utilizar los servicios que tenemos a nuestra disposición: grifos, rejillas de vaciado de aguas, enchufes…
De la misma manera, te hablamos sobre cómo relacionarte con el entorno y los habitantes de los pueblos y ciudades que visitamos. A mí me encanta sentarme en los bares de los pueblos pequeñitos y ver la vida pasar. Recuerdo con mucho cariño a aquella abuela de Las Hurdes que nos sirvió un refreco y empezó a preguntarnos un montón de cosas: de dónde veníamos, que cómo se nos había ocurrido meternos en su pueblo si no tenía nada (era una delicia de lugar), curioseó nuestra furgo y se moría de la risa cuando le contamos que dormíamos dentro. Para ella era una locura y decía que eso era cosa de jóvenes. También recuerdo a aquellos señores de otro pueblo, que nos miraron con estupor cuando llegamos. Se levantaron a preguntarnos que si vendíamos melones.
El mundo del turismo itinerante os regala experiencias así. El Manual del Buen Autocaravanista habla de los valores de contacto con la población local y respeto al medio natural que compartimos los amantes de esta forma de viajar.
Puedes descargar el manual completo aquí:
>>Manual del Buen Autocaravanista
De corazón, esperamos que esta guía te sea útil. Te animamos también a que la compartas con quien creas que puede necesitarla.
Un abrazo fuerte.
